La batería de Níquel Cadmio trabaja en un amplio rango de aplicaciones estacionarias de uso general, tales como, alarmas, sistemas fotovoltaicos, telecomunicaciones, señalización ferroviaria y naval, centrales térmicas, hidroeléctricas y nucleares, plataformas petrolíferas y marinas, entre otras.
Las baterías de Níquel Cadmio constituyen una de las tecnologías de baterías más establecidas en la actualidad y de mayor producción después de las de Plomo Ácido.
Su mayor degradación es causada por sufrir un efecto transitorio de pérdida de capacidad, comúnmente conocido como “Efecto Memoria” si son descargadas-cargadas hasta el mismo nivel en repetidas ocasiones. El síntoma, para decirlo de algún modo, es que la batería se “acuerda” de los niveles de descarga-carga y sufrirá una caída de voltaje en descarga en este punto ofreciendo así menos tiempo de descarga.
La tecnología de Ecobatería a través de su equipamiento puede reducir considerablemente el efecto memoria recuperando las capacidades iniciales.
No lo dude y empieze hoy a ahorrar con Ambiente y Baterias de Murcia |